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oraciones a la medalla milagrosa

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues un Dios se recrea, con tan hermosa hermosura, a ti, celestial princesa, Virgen Sagrada María, te ofrezco en este día, alma, vida y corazón, mírame con compasión, no me dejes Mi madre. Ampárame mi madre, con el escudo asegurador de tu medalla. Una verdadera fe que este acompañada de una incesante oración es la mejor herramienta para conseguir que Dios logre concedernos milagros y necesidades. La Medalla Prodigiosa es un símbolo por el que la Virgen Santísima puede intervenir por nosotros ante Dios y cumplir nuestros deseos. Pero en el momento en que nuestra fe es verídica y está robustecida en Cristo Jesús, no hay quien logre contra .

¿a quién recurriremos oh María, sino a Ti, que eres nuestra Madre, en cuyas manos Dios ha puesto sus gracias? En la parte frontal de la medalla, María hace aparición sobre un globo que representa el planeta. La Virgen te proporciona protección si clamas para conseguir sus gracias y bendiciones.

Oración A Nuestra Señora De La Medalla Prodigiosa Por La Intercesión De Santa Catalina Labouré

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Por mucho tiempo pensé que consagrarse a ella, era como traicionar de alguna manera a Jesús, que como Dios debe ser nuestro centro. Sin embargo, Dios en su clemencia infinita me mostró hace un año a través del TVD que lo que solicitemos a , es como si se lo afirmáramos al oído a EL. Me consagré hace tres años, pero a penas el año pasado, mi mente se abrió al entendimiento de quién es Nuestra Madre. Le solicito perdón tanto a como a nuestro Señor por ser tan cerrada a pesar que es «tan obvio» en el momento en que un corazón está abierto al amor misericordioso.

En caso contrario no se entiende nada como me pasó. Ruego a Dios que varios católicos puedan reconocerla, amarla y extender su amor a muchos. Usted está leyendo este producto gracias a la generosidad suya o de otros varios lectores como usted que hacen viable este fantástico proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.

Le oriento a hacer una medalla donde se demostrara frente el planeta que ella como santa madre. , que nunca se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio, haya sido desamparado. Animado por esta seguridad, a Vos acudo, oh Madre, Virgen de las vírgenes, y gimiendo bajo el peso de mis errores me atrevo a comparecer ante Vos. Oh madre de Dios, no desechéis mis súplicas, antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente.

Te pedimos por los que padecen pruebas particulares, físicas o morales, por los que están tentados de infidelidad, por los que son zarandeados por la duda de un tiempo de incredulidad, y también por los que sufren persecución a causa laoracionasanpancracio.com de su fe. Oh María, sin pecado concebida, suplica por nosotros que recurrimos a ti. Sin tardanza pregona lengua mía las glorias y loas de María. Atiende a mi socorro, enorme Señora, y ampáreme tu diestra protectora.

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