La muerte de Oracion Al Señor De Los Milagros
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oracion al señor de los milagros
Señor de los milagros, me conoces y sabes de mis dolores, mi cuerpo es frágil precisa de tu unción para vencer esta enfermedad que estoy padeciendo. Coloco en tus manos bondadosas y santas cada una parte de mi cuerpo, lo sello con tu sangre bendita para que desaparezca toda afectación y debilidad, decaimiento o impedimento que en presente. Me uno a los dolores de tu pasión y tu cruz y te solicito, que por tus santas llagas, apartes de mí esta patología y me regales la sanación que anhelo.
Ya sufrió el Profesor adorable el tormento del sudor de sangre en el huerto de los Olivos. La noche fué de agonías infinitas y de males atroces después oraciones-catolicass.com del beso traidor de Judas. De tribunal en tribunal le han llevado para que un juez inicuo le condene a muerte de cruz.
Oración Al Señor Milagroso A Fin De Que Me Llamen De Un Trabajo Urgente
Cambia Señor las heridas, en justicia y integridad. Vamos realizando sendero entre gozos y mal. Mira al pueblo en aflicción, Samaritano divino, y que tu aceite y tu vino hagan fecunda la cruz. El reino fue tu programa, la justicia y la fraternidad compra venta automoviles, la paz y la caridad que un nuevo mundo proclama y que el corazón inflama, Peregrino de Emaús.
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— Luz Arias (@Ari5Lz) October 21, 2020
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Encuentra una manera importante y personal de agradecer a Dios. Alábale con tu oración, pensamientos y acciones. Agradécele cantando una oración, con pensamientos de gratitud o con una acción noble. Alaba a Dios por Su guía y sabiduría. Alábalo por aliviar tus temores, aliviar tu inseguridad y ofrecerte promesa. Alábale por su lealtad y compromiso hacia ti.
ORACIÓN AL SEÑOR DE LOS MILAGROS POR LOS ENFERMOS:
Oh Señor de los Milagros,
te pido con humildad,
sane a “nombre del enfermo”,
que se recupere de tan grave enfermedad,
sus dolencias las supere,
que la sepa tolerar,
que la fe y en amor a Dios
en quien lo va a mejorar.— guillermo rodriguez (@GruCristiano) December 12, 2020
Permite que el poder y felicidad de Dios te conmueva al rezar. Reza con el corazón abierto y preparado para recibir. No doblegues tus emociones, déjalas salir. En el momento en que te sientas conmovido y a punto de plañir, permítete llevarlo a cabo. En el momento en que sientas la necesidad de vocear, ¡grita!